viernes, 29 de diciembre de 2006

vertedero

los bebés aprenden sin darse cuenta de que están aprendiendo (me he documentado), y he llegado a la conclusión de que así es como nosotros aprendemos a ser tratados como basura, sin darnos cuenta.
espero que tengas suerte y te reciclen, que no vayas a parar a un vertedero, en el que niños que apenas han aprendido a caminar busquen en tus entrañas chapas de refrescos y las guarden cuidadosamente en tarros de cristal, como sí del más preciado tesoro se tratase.
y es que no conozco mayor prueba de mi hipocresía que el vertedero en que me he convertido.



within you
ray lamontagne - till the sun turns black [rca; 2006]

PS. gracias a luis db por descubrírmelo

5 comentarios:

Shay dijo...

Te sientes así?
podrías intentar darle la vuelta y sentirte enriquecido por un momento?
vale, ahora vuelve a la idea del vertedero.


Un mal día.

Ágætis byrjun dijo...

pocas veces me he sentido tan bien.
pensaba en alto sobre la hipocresía de la autocompasión.
me apena pensar en las personas que creen que otro mundo es posible. las manos hambrientas nunca podrán vencer a las corbatas, como las piedras nunca vencerán a los tanques.
puedes cambiar, puedes hacer que el cambio comience por ti, puedes creer que JFK tenía razón.
o puedes trocar tu utopía por pragmatismo y aprender a hacerte el nudo.
yo...pienso seguir dejando que me los hagan ;) y buscando cuerpos transparentes.

Anónimo dijo...

Una piedra no puede con un tanque. Pero una mente sabe como hacer que este no funcione. Muchas mentes harán que no tenga sentido usarlo.
Muchos corazones alimentarán sentimientos. Esos sentimientos moveran conciencias.
Muchas conciencias serán muchas piedras, y muchas manos.
Muchas piedras acabaran con muchos muros. Y muchas manos apretaran mucho las corbatas.
Lo importante en la ecuación es ser muchos.

La realidad que nos rodea si provoca esos sentimientos que me dices. Pero siendo todo lo cruda que es, no se ve en todas partes. Hay paredes y muros que no son de ladrillo, y la "ficción" llega más lejos y más rápido que la realidad misma en este mundo en que vivimos (desgraciadamente).

No te conozco. Pero haré lo posible por conocerte. Desde aquí. Desde tu blog. Con tu granito de arena.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Un vertedero puede ser un paraíso de material reciclable, la base para una creación insólita donde la clave es ligar piezas y mutar olores. Seguiremos buscando entre los restos en este 007. Vale, Harry? We'll go on flying ;)

Gracias por el tema.

Bibián dijo...

Que basurero tan bonito eres! (Se parece un poco al de mi hueco, pero no se lo digas a mi madre, por dios!)